martes, 29 de noviembre de 2011

29 noviembre, 9:25 am

Me desperté 
y el sol se asomó 
por mi ventana, 
al verlo 
vi como me mirabas 
y con el soplo del viento 
me suplicabas. 
Te vi, 
te sonreí 
y hasta te besé.
Pero, ¿te diste cuenta? 
No,
aún no estaba despierta,
creo que todo lo soñé.

lunes, 28 de noviembre de 2011

Pobre corazón

Una hoja gastada, 
un lapicero con poca tinta, 
el café más fuerte, 
una caja de cigarrillos 
y un cenicero para complementar, 
para mitigar el sueño, 
para hacer fluir el pensamiento.
Un respiro profundo 
y es un nuevo día, 
el olor a tabaco en mi cuerpo, 
el deleite aroma a café 
por todos mis huesos.
Sentada,
en una vieja silla de madera 
con el cigarrillo en la mano, 
viendo la luna brillar 
y la gente pasar. 
Todos los días es igual, 
la misma rutina, 
ya hasta me cuesta respirar. 
La luna cae 
y nada cambia, 
los chasquidos de la vieja silla 
así como los látidos 
de este débil corazón, 
cada vez son menos, 
se van esfumando con el humo 
y uniendo con las cenizas 
de mi antiguo cajón, 
este pobre corazón.
Esa hoja gastada, 
ese lapicero con poca tinta, 
ese café, 
esa caja de cigarrillos 
y ese cenicero, 
se convirtieron 
en los testigos 
de mis noches frías.

domingo, 6 de noviembre de 2011

Camino a ninguna parte


Y continúa la angustia, 
pensamientos absurdos 
que añoran lo que nunca existió,
en medio de la oscuridad,
más grande se hace todo a mi alrededor.
Ilusa buscando la luz,
perdida en penumbras 
me atacaba la soledad 
y al lago de mis espaldas 
fui a navegar.